Sueña, crea y camina tu propia vereda. Un pequeño paso a la vez.
Mi nombre es Margrita van der Hoek, fundadora de Veredas Coaching. Una vereda es un camino, por lo general, pintoresco y agradable que nos lleva a nuestro destino. La vereda no siempre es sencilla y a menudo presenta retos. Posiblemente tenga encrucijadas, irregularidades y obstáculos. En ocasiones no vislumbramos el camino y perdemos el rumbo porque los árboles no dejan ver el bosque. A menudo estamos acompañados durante la travesía, otras veces nos encontramos solos. En todo caso la vereda es variada, colorida e interesante.
Lo que es seguro es que VEREDAS te invita a una aventura gratificante. COMO EL COACHING.
En el coaching se trata de fijar metas, encontrar
opciones, escoger la mejor, explorar creencias limitantes, descubrir tus recursos y sobre todo, de actuar.
En la búsqueda de tu vereda personal, disfrutas del camino, superas retos y alcanzas satisfacción al llegar a tu objetivo.
Como coach certificada, me produce emoción
embarcarme en esta aventura contigo a través de la metodología del coaching basada en la
evidencia. Me alegra apoyarte en el encuentro con tu naturaleza única para que experimentes
plenamente la vida. Un pequeño paso a la vez.
Servicios
Coaching en español, inglés u holandés
Las sesiones y talleres pueden
ser en persona o virtual
(por zoom).
Coaching para todas las edades y circunstancias
El coaching puede marcar la diferencia tanto en tu vida profesional como personal y es útil para cualquier edad o fase de vida.
Coaching vocacional para alumnos de preparatoria
Margrita se certificó en Coaching para Adolescentes en el Youth Coaching Institute. Aplica exámenes de aptitudes, intereses y personalidad y ofrece un acompañamiento para que el proceso de escoger una carrera profesional se convierta en un reto positivo.
Testimonios
En definitiva, ser un adolescente en estos tiempos puede llegar a ser abrumador y desafiante. Se nos impone el cliché de “encontrar nuestro propósito” mientras que al mismo tiempo tenemos que lidiar con los altibajos de la adolescencia. Es fácil perderse en este intrincado camino lleno de decisiones importantes sin las herramientas adecuadas. Cuando empecé a tomar mis primeras sesiones de coaching con Margrita sentí que encontré el ojo del huracán. En toda la locura de la vida cotidiana tenía un espacio seguro y tranquilo donde sentía que alguien por fin me escuchaba genuinamente. Poco a poco, este huracán se fue difuminando dentro de mi mente, y a pesar de que los vientos soplaban y la lluvia me nublaba, el coaching me ayudó a persistir. Salía perplejo de cada sesión; sentía que Margrita era la mejor escucha y a quién debía acudir cada que enfrentaba un problema en mi vida. No obstante, ahora que terminé mis sesiones me di cuenta que las respuestas estaban dentro de mi y que simplemente necesitaba las herramientas necesarias para descubrirlas. Con tareas concisas, atinadas y sesiones repletas de reflexiones, el coaching con Margrita es algo que recomendaría a todas aquellas personas que necesitan un descanso en esta vereda que es la vida.
Alumno de preparatoria, 17 años
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